Llegó el segundo puente del año y, como no queremos que se queden en casa, los invitamos a visitar Hermosillo. La capital de Sonora, mejor conocida como la ciudad del Sol, es el destino perfecto para huir de la rutina. La ciudad fue fundada el 5 de septiembre de 1828 y nombrada así en honor al general José María González de Hermosillo.
La ciudad está situada en el centro del estado y tiene una población de 2,874,391 habitantes. Es la ciudad más poblada de Sonora y un lugar que ofrece a sus visitantes una gran variedad de experiencias para disfrutar esta joya del país al máximo.
Hermosillo recibe al año un promedio de casi medio millón de turistas. En concreto, la Subsecretaría de Planeación y Política Turística, la Comisión de Fomento al Turismo del Gobierno del Estado y la Secretaria de Turismo coinciden en que Hermosillo recibe 495,5o7 mil personas al año. Su ubicación, a 287 kilómetros de la frontera con Estados Unidos, le permite tener tránsito tanto nacional como internacional.
Algún día José Vasconcelos mencionó que “la cultura termina donde comienza la carne asada”, refiriéndose al norte del país. Lo cierto es que este dicho puede ser desmentido -y también confirmado- por la bella capital de Sonora. En realidad, Hermosillo es una ciudad que se puede vivir a través de los cinco sentidos. Lo pueden comprobar ustedes mismos si visitan los preciosos enclaves que aquí les proponemos.
Las mejores fechas para ello son desde finales de marzo hasta mediados de junio y desde septiembre hasta noviembre. Esto se debe a que en Hermosillo los veranos son cálidos, áridos y extremos -se llegan a alcanzar los 45ºC- y los inviernos fríos y secos. A lo largo del año el cielo se ve despejado y con poca lluvia.
Los paisajes y amaneceres que este lugar ofrece no tienen comparación. Entre ellos, podrán disfrutar de los de la playa de Bahía de Kino. Esta tiene vistas a la Isla Tiburón, y ofrece los mágicos colores de su puesta del sol. Todos estos siempre acompañados de la variada flora del desierto: sahuaros, mezquitales, palo blanco, palo fierro y palo verde.
Su arquitectura refleja la inspiración del movimiento neoclásico y se puede observar principalmente en el palacio de gobierno. Ubicado en la Plaza Zaragoza, este cuenta con el mural titulado El Hombre de Sonora, pintado por Héctor Martínez Arteche. En él se muestra la evolución de la sociedad sonorense.
Si recorren sus alrededores, podrán conocer la Plaza Bicentenario, el Museo de Culturas Populares e Indígenas de Sonora. Al fondo, podrán admirar el Cerro de la Campana.
En el ámbito de la gastronomía, Sonora ofrece un rico panorama de platillos. Este va desde la tradicional carne asada hasta los mejores mariscos del Mar de Cortés. Su postre típico es la coyota, una mezcla de harina, manteca vegetal, leche, azúcar, y su característico relleno de piloncillo… Definitivamente, es algo que no se pueden perder.
Desde mediados de Abril hasta Mayo, se celebra la tradicional ExpoGan Sonora, un evento familiar que cuenta con actividades para todos, desde los los juegos hasta los bailes populares. Cada año presenta una variada cartelera de artistas en su palenque. Los fines de semana a lo largo de este periodo se convierten en salidas a pistear con botas y sombrero, y bailar al son de la música de banda.
El hermosillense es cálido como el clima y noble como el borrego cimarrón; rara vez te va a negar un buen tarro de cerveza artesanal o un burro percherón. Asistir al estadio de béisbol semanalmente para ver todos y cada uno de los partidos es parte de su religión, pero, tanto si a ustedes les gusta este deporte como si no, tengan por seguro que, si deciden ir a visitar Hermosillo, serán recibidos con los brazos bien abiertos.