El día de hoy, 12 de mayo del año 2025, vincularon a proceso a la totalidad de los integrantes del grupo musical de regional mexicano conocido popularmente como “Los Alegres del Barranco”, lo anterior, por presuntamente haber cometido el tipo penal de Apología del delito.
El tipo penal anteriormente referido, se encuentra tipificado en el Artículo 208 del Código Penal Federal, mismo que a pie de letra señala expresamente lo siguiente: “Artículo 208.- Al que provoque públicamente a cometer un delito, o haga la apología de éste o de algún vicio, se le aplicarán de diez a ciento ochenta jornadas de trabajo en favor de la comunidad, si el delito no se ejecutare; en caso contrario se aplicará al provocador la sanción que le corresponda por su participación en el delito cometido.”
No obstante, ¿Qué es la apología?, la apología hace referencia a la exposición efectuada ante una concurrencia de personas o por cualquier otro medio de difusión, de ideas o doctrinas que ensalcen el crimen o enaltezcan a su autor, constituyendo lo anterior una incitación directa a cometer un delito.
Este tipo penal, presuntamente fue cometido por “Los Alegres del Barranco” el pasado 29 de marzo del año 2025, luego de que durante uno de sus conciertos efectuado en el Auditorio Telmex en Zapopan, Jalisco, interpretaran “corridos” dedicados a Nemesio Oseguera, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación y a Joaquín Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa, proyectando imágenes de ambos líderes en las pantallas del auditorio, resultando las mismas visibles para todos los asistentes.
Esta vinculación a proceso añade una nueva batalla a la “guerra” del gobierno mexicano contra la narcocultura, misma que ha normalizado conductas tipificadas por ley y ha configurado modelos a seguir contrarios al marco normativo hacia cientos de mexicanos, sobre todo, a los de menor edad. Si bien, la música es un medio legítimo de expresión, está siendo utilizada para glorificar actividades ilícitas, lo que pudiera generar consecuencias negativas en la percepción sobre lo qué es correcto y lo qué no, no obstante, sería ideal que el gobierno mexicano pusiera el mismo empeño en vincular a proceso a quien cometa el delito en sí mismo y no únicamente a quien realice la apología de este.