En una reciente orden ejecutiva, Donald Trump ordenó a las compañías estadounidenses a detener operaciones con TikTok y WeChat. Ambas compañías son chinas, y, según el presidente, esta acción la toma para “proteger la seguridad nacional”. Dicha orden entrará en acción el 15 de septiembre, dando algo de tiempo a las empresas estadounidenses para deslindarse de sus conexiones chinas. En consecuencia, la compañía de Microsoft ha revelado que piensa comprar la red social de TikTok antes de terminar el plazo.
La compañía de TikTok es gestionada por la compañía china de ByteDance. En cambio, la aplicación de WeChat es manejada por el conglomerado tecnológico de Tencent. Adicionalmente, Washington declaró que aquellas compañías que cotizan en mercados de valores deben ser eliminadas. Sin embargo, si las compañías brindan acceso a sus cuentas auditadas se les permitirá continuar su operación.
El presidente citó la Ley Nacional de Emergencias y la Ley Internacional de Poderes Económicos de Emergencia como autoridad para su orden.
¿Qué es WeChat?
La aplicación es un aglomerado de redes como Facebook, Instagram, WhatsApp, Tinder y Paypal. Para aquellos que tienen conexiones o negocios con China, el uso de la aplicación es crítica. En especial, porque aplicaciones como Facebook están prohibidas en el país. WeChat también permite al gobierno chino monitorear la actividad de sus ciudadanos.
TikTok, enemigo mundial
Estados Unidos no es el primer ni único país que busca eliminar la famosa plataforma social. En este año el territorio de Hong Kong impuso un castigo a los que descarguen la aplicación en la ciudad. De igual manera, el gobierno de Nueva Delhi declaró esta red social como “un peligro a su soberanía digital”.
Tencent y sus conexiones mundiales
La compañía Tencent tiene vínculos con varias empresas de videojuegos de Estados Unidos. Este conglomerado cuenta con acciones en firmas como Epic Games y Riot. Estas dos compañías tienen dos de los juegos más populares del mundo, “Fortnite” y “League of Legends” respectivamente. De igual manera, Tencent se conecta con la NBA a través de sus contratos para transmitir los partidos por “streaming”.
Al ser amenazados con dicha orden ejecutiva, Tencent vio una caída de más de 10% en sus acciones. Esto se traduce a pérdidas de más de 50 mil millones de euros.