El histórico estadio Azteca presenció una batalla más entre el Cruz Azul y el América. Estos últimos fueron los que celebraron de nueva cuenta, porque, pese a la derrota de 1-0. Consiguieron superar a los cementeros en el marcador , pues debemos recordar que habían ganado 3-1 en el partido de ida. De esta manera, las Águilas consiguieron por cuarta ocasión consecutiva avanzar a las semifinales de la Liguilla Mx.
A pesar de la victoria por la mínima y el gran partido que dio La máquina del Cruz Azul. Este equipo quedó eliminado de la liguilla del Clausura 2019. El marcador final de la vuelta de 1-0 no , terminó por ser de 2-3 favorable para los dirigidos por Miguel Herrera.
El encuentro empezó de manera vibrante con un Cruz Azul volcado al frente y desesperado por meter un gol. Un América que aguantaba los embates celestes. La primera jugada de peligro del Azul llegó al 13’, tras un disparo de bolea por parte de Madueña. Quien terminó pasando por un lado de la cabaña de Marchesín.
Los locales eran claros dominadores del encuentro; muestra de ello fue que, tan sólo dos minutos más tarde, Jonathan ‘Cabecita’ Rodríguez pudo adelantar a los cementeros, pero no aprovechó el centro preciso que le puso Milton Caraglio, pues, a pesar de estar solo, ‘Cabecita’ Rodríguez mandó el balón a las gradas.
Por más que el Cruz Azul insistía, se les negaba el gol, por fallos de los delanteros o por acierto de los defensas. Una pieza fundamental del América para no irse abajo en el marcador fue el portero Marchesín, quien al 40’ hizo una atajada espectacular que mandó el balón al larguero, con lo que evitó el gol de Orbelín Pineda. De esta manera se fueron al descanso con un Cruz Azul amo del juego y un América que estaba a la defensiva.
En el inicio de la segunda parte, al minuto 47, el ‘Cabecita’ Rodríguez venció por fin al guardameta azulcrema con un potente disparo imposible de parar. Al caer el primer gol la cancha estalló de emoción y comenzó a vibrar al grito de ¡Azul! ¡Azul!
A partir del gol, el partido se tornó en un encuentro bastante intenso, pero sin jugadas claras de gol. A pesar de ser dominadores del balón, los cementeros no podían marcar ese segundo tanto que los clasificara.
La tensión del partido duró hasta el último minuto, cuando el árbitro central marcó tiro de esquina a favor del Cruz Azul; toda el área de los azulcremas estaba copada por jugadores celestes que buscaban el milagro. Entre ellos, Pablo Aguilar se elevó para rematar el centro, pero apareció de nueva cuenta Agustín Marchesín para salvar en la línea de gol al América. Con esta jugada llegó el final del partido.
De esta forma, el Cruz Azul cortó la racha de 15 partidos consecutivos de no poder ganar frente al América; sin embargo, la paternidad sigue existiendo. Pareciera que los esfuerzos celestes fueran en vano, pues la malaria frente a los de Coapa no tiene fin.
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