Este domingo 13 de noviembre se llevó a cabo la 5K//10K UP Race. Era un día muy importante para la Universidad Panamericana, y también para mí, pues ese día cumpliría la mayoría de edad entre kilómetros de celebración. Tras los años de pandemia, la decimocuarta edición de la carrera por fin pudo celebrarse sin contrariemposse y este año fue un rotundo éxito en el que participaron más de 450 corredores.
Como cada noviembre desde que se construyó el estacionamiento y hasta 2019, la comunidad universitaria se reúne en el edificio con gran entusiasmo desde primera hora de la mañana. Las estrellas de la jornada fueron sin duda corredores, entre los que se encontraban estudiantes, ex alumnos, docentes, personal administrativo, personal de mantenimiento, administrativos, familiares y amigos.
La carrera en la modalidad de 5K empezó a las 7 de la mañana. Cinco minutos después empezó a de 10K. Había puntos de hidratación estratégicos a lo largo del recorrido, donde los voluntarios repartían bolsas de agua. Yo cogí como media docena porque estaba muy deshidratado, y familiares y comisarios de carrera tenían palabras de ánimo para los corredores. Aunque parezca pequeño, es un gran detalle y supone una enorme inyección de energía y adrenalina para todos los deportistas. Sobre todo para los aficionados como yo, porque les motiva aún más a conseguir sus objetivos.
La verdad que estaba un poco desilusionado porque el día de la carrera era mi cumpleaños y estaba deseando que llegara, ya que sería el día que cumplo 18 años y en España ya me llamarían Don, así que allá yo seria Don Reynaldo. Sin embargo, yo iba a pasar ese día tan especial para mí corriendo.
Entonces, decidí cambiar la frustración por la libertad que da el aire fresco rozándote la cara. Así, al mismo tiempo que mi respiración se aceleraba debido a la carrera, sentía los gritos de motivación de mis padres y mi abuelo siguiéndome desde la parte trasera de la camioneta. Fue así cómo todos los pensamientos negativos desaparecieron y mi respiración de cansancio se detuvo. Gracias a mi familia y a un cambio de actitud pude terminar la carrera en la mejor posición que podría haber deseado. Para ser más preciso, quedé en el puesto centésimo décimo noveno en la categoría de libre varonil.
En la línea de meta de la pista, los corredores de 5K y 10K recibieron medallas conmemorativas de la carrera. Además, se repartieron mitades de naranja, plátanos, agua y electrolitos para la recuperación tras el agotamiento de la ruta asfaltada. A las 8:30 se procedió a la entrega de premios a los tres mejores de cada categoría. No solo los ganadores recibieron obsequios, sino que todos los corredores participaron en una rifa de obsequios de los patrocinadores del concurso. Por cierto, y como regalo inesperado de cumpleaños, yo obtuve una playera de recuerdo.
Al finalizar del evento se realizó una competencia infantil en la que participaron hijos y hermanos pequeños de nuestra comunidad UP. El concurso terminó con un resultado positivo, porque este tipo de actividad, además de beneficios para la salud, crea una sociedad unida y aumenta el sentimiento de pertenencia a la universidad.
Ganadores 10k:
LIBRE FEMENIL (15 a 39 años)
LIBRE VARONIL (15 a 39 años)
MASTER VARONIL (40 y más)
Ganadores 5K:
LIBRE FEMENIL (15 a 39 años)
LIBRE VARONIL (15 a 39 años)
MASTER FEMENIL (más de 40 años)
MASTER VARONIL (40 a 49 años)
VETERANOS VARONIL (50 a 59 años)