En los últimos años la desigualdad de género se ha hecho más grande, y la academia busca cada vez más visibilizar a las mujeres. Por primera vez, Reuters Institute y la Universidad de Oxford han analizado el comportamiento de las mujeres con las noticias. Este estudio se ha llevado a cabo en Kenia, África del sur, Corea del sur, Hong Kong, Japón, México, Brasil, Finlandia, Alemania, Gran Bretaña y Estados Unidos. Como se puede observar, se estudian 11 países, que van desde el más rico hasta algunos de los más pobres, para diferenciar las percepciones.
La Dra. María Elena Gutiérrez Rentería, maestra e investigadora de la Universidad Panamericana, ha participado en el análisis de dicho reporte, con el análisis del apartado que corresponde a México. En esta entrevista hemos logrado conversar y entender el rol de la mujer en la percepción y papel en las noticias. Es importante destacar que, como investigadora de la Escuela de Comunicación, su aportación es excepcional.
Dra. María Elena Gutiérrez Rentería. Como académica y con mi experiencia, puedo observar que, definitivamente, ha sido positivo el cambio y la participación de la mujer en los medios, sobre todo en el ámbito periodístico. La mujer se ha visto mucho más activa en todos los sectores de la economía, aunque aún existe un rezago de índole educativo, político, social y de inequidad. Respecto a la Industria, se ha tenido evidencia de que hay casos de mejora, como por ejemplo el de Carmen Aristegui. Ella empezó en un medio tradicional y fue construyendo sus audiencias con su trabajo y creando su propio medio, con los mayores índices de confianza en México.
M. E. G. R. Mi interpretación sería que en México la participación del varón en la política y la economía sigue siendo bastante significativa y con mayor peso y sigue representando la materia económica en los hogares mexicanos. En cambio, la mujer está más al cuidado de los hijos y sus realidades de trabajo, evidentemente. Pero la realidad es que hay muchísimas mujeres que son la principal fuente de ingresos de sus hogares y entre los quehaceres no les da tiempo a buscar noticias. Son características sociodemográficas de la población que influyen en los intereses. Aunque la mujer ha comenzado a participar en actividades políticas y económicas, es lógico que seguirán buscando noticias con las que se identifiquen más.
M. E. G. R. Yo creo que son dos factores: los intereses y la situación demográfica. En algunos aspectos del reporte sí nos dice que el varón tiende a consumir más noticias de índole política y económica. Mientras que la mujer está más preocupada en temas de salud, cambio climático y otros aspectos. Sin embargo, en todos los sectores de la población, los intereses dependen de la situación de cada persona, sin importar género.
M. E. G. R. Yo creo que, en general, tanto para periodistas varones como mujeres, la igualdad es muy importante en cuanto a nivel de seguridad. En temas de derechos humanos, profesionales, económicos, equidad e igualdad, me muestro optimista. Cabe destacar que lo relevante es la competencia profesional, la justicia y la equidad, no el género. En general, la inclusión social y la equidad es para todos los sectores de la economía. Hay trabajos que, por su naturaleza, requerirán un perfil más de varón o mujer. Es tema de antropología. Pero se debe garantizar la equidad de género en el desarrollo laboral y de oportunidades profesionales.
M. E. G. R. Primero, la dignidad humana no depende del nivel socioeconómico, sociocultural, de género. La dignidad es la misma para todos. El tratamiento informativo debe ser el mismo, siempre apelando a la deontología informativa que en este caso es el ‘deber ser’. De igual forma, la máxima es la persona y todo lo que tiene que ver. Se sabe que en la Legislación de México se debe proteger la dignidad y cuidar el no difamar. En este caso no se respetó en redes sociales y medios, lo cual fue alarmante. Además, todo lo que sale de los medios amarillistas es basura y debería estar penalizado.
También me preocupan aquellos que se distinguen como periodistas y no respetan su profesión ni la dignidad humana. Siempre ha existido este tipo de periodismo y las personas que lo consumen son personas carentes de valores o que no profundizan en el valor del trabajo periodístico. Por otro lado, el nivel de confianza se mediría punto y aparte. Aunque creo que definitivamente subiría el nivel de confianza ante contenido con suma de múltiples factores positivos. En la medida en que el periodista profesional haga contenido de calidad, elevará la confianza.
M. E. G. R. No. La confiabilidad no depende de si es varón o mujer. Es verdad que el machismo en México es muy fuerte. Por ejemplo, para la mujer, la figura del varón, su voz, contundencia… tiene mucho impacto en la mujer por cultura. En México, el factor cultural sí afecta, sin embargo, cada vez menos. Por lo mismo que tenemos mujeres periodistas que sobresalen, como Carmen Aristegui.
M. E. G. R. Para mí es un honor que me inviten Reuters Institute y la Universidad de Oxford a formar parte. Ellos me buscan, para mí es un honor, una satisfacción y orgullo, sobre todo porque lo hago representando a la Universidad y a la Escuela de Comunicación.
M. E. G. R. Sí. En estudios de marketing que ya he realizado sí se tratan las diferencias de consumo entre varones y mujeres. Pero, así como tema de equidad de género, este es el primer estudio que hago. Además, es el primer estudio que hace Reuters Institute a nivel global sobre el tema. Recordemos que el tema de equidad de género se puso de moda hace un par de años.
M. E. G. R. No, porque yo creo que es una realidad, siempre ha existido. Pero yo creo que hay batallas más importantes que ganar. A mí me interesa más que mis alumnos sean los más felices a través de su vocación periodística. Para mí, ese es mi principal motivador y no me importa si es varón o mujer. A mí no me apasiona el tema de equidad de género en el periodismo, me interesa que mis alumnos sean los mejores periodistas y líderes de opinión.
M. E. G. R. Me parece muy bien, hay unas investigaciones buenas. Sin embargo, no las leo todas porque mi interés no está centrado en ello. Sabemos que hay grupos radicales, feministas que yo admiro, mujeres trabajadoras, profesionales, entregadas, responsables. Eso es para mí el buen feminismo. Como género, somos distintos y cada uno tiene características diferentes admirables. En consecuencia, se debe apoyar la equidad y no la opresión del otro género.